• Es una iniciativa para la reconstrucción del corazón nacional, subraya Beatriz Pagés
• La secretaria de Cultura del CEN del tricolor encabezó una reunión plural con líderes religiosos, sociales y culturales, así como diplomáticos y legisladores

Al encabezar el Encuentro “Obreros por la Paz”, en el que participaron líderes religiosos, sociales y culturales, así como diplomáticos y legisladores de diversos partidos políticos, la secretaria de Cultura del CEN del PRI, Beatriz Pagés, subrayó que “la violencia, el fanatismo y la satanización dividen” y resaltó que ésta “es una iniciativa por y para la reconstrucción del corazón nacional”.

En el Museo “Memoria y Tolerancia” de la Ciudad de México, precisó que esta reunión constituye un espacio plural que tiene como propósito fundamental provocar un giro en la lucha contra la violencia y la reconstrucción de la paz.

En compañía de Arturo Montelongo, Secretario Ejecutivo de Movilidad Humana de la Conferencia del Episcopado Mexicano; de Jonathan Peled, embajador de Israel en nuestro país; y de la senadora priista Yolanda de la Torre, integrante de la Comisión de Derechos de la Niñez y de la Adolescencia, se pronunció en contra de la violencia armada, ideológica, política y cultural.

Confió en que el gobierno federal realice un mayor esfuerzo tendiente a enfrentar con una estrategia más efectiva al crimen organizado, en la que participen de manera conjunta todos los integrantes de la sociedad.

Junto a Bernardo Benítez, padre de uno de los jóvenes víctima de la delincuencia en Tierra Blanca, Veracruz; y Antonio Chedraoui Tannous, Arzobispo de la Iglesia Católica Ortodoxa de Antioquía en México, la dirigente priista sostuvo que la violencia gana porque hay impunidad, omisión en la aplicación de la ley, irresponsabilidad y falta de visión en el combate al crimen organizado.

“Los mexicanos nos hemos convertido en víctimas de una mezcla perversa, donde a la corrupción, a la ineptitud y a la ilegalidad se suma la politización de la verdad y de los derechos humanos”, apuntó.

En su oportunidad, Abner López, Decano Académico del Seminario Teológico Presbiteriano, indicó que “ser hacedor de la paz tiene un precio, pues no se trata nada más de hablar de ella, es una forma de ser, de conducirnos con nosotros mismos y con nuestros semejantes”.

Hablar de paz, dijo, y no reflejarlo en nuestra manera de vivir, es hipocresía, es una negación de lo que afirmamos ser; ser un pacificador no es una opción para el cristiano, es un imperativo.

Por su parte, Alejandro Salazar, de la Alianza de Pastores de la Ciudad de México, señaló que “la paz no es algo que nosotros hayamos inventado, es algo que fue establecido desde el origen de la creación del ser humano”.

La paz, recalcó, es algo que se tiene que trabajar primeramente en nosotros, con nuestra persona y como individuos.

En el encuentro participaron la pintora Rina Lazo; Viviana Basanta, directora de México en Movimiento; Lani Anaya Jiménez, pastora de la Iglesia Metodista de México y la asambleísta del PRD, Luisa Alpízar Castellanos.

También estuvieron presentes Le Linh Lan, embajadora de Vietnam; la senadora perredista Angélica de la Peña, presidenta de la Comisión de Derechos Humanos; y los escritores Beatriz Espejo y Felipe Garrido, entre otras personalidades.